martes, 26 de marzo de 2013
La torre 1887
Heredad de La Torre propiedad del Ilustrisimo Señor Don Antonio Lamo de Espinosa Palavecino. 15-8-87
Firma Salcedo. Onil
sábado, 23 de marzo de 2013
Alcala Zamora en Alicante 1932
Puerto de Alicante 1932
Barcos de Guerra que se trasladan a Alicante para recibir Alcalá Zamora
Articulo del diario de la Verdad de Alicante del día 15 de enero 2012 recordando la visita del Presidente de la II República España 1932.
Desfile Militar
Desfile de las Tropas ante el Presidente.Barcos de Guerra que se trasladan a Alicante para recibir Alcalá Zamora
Articulo del diario de la Verdad de Alicante del día 15 de enero 2012 recordando la visita del Presidente de la II República España 1932.
Tal día como hoy de hace ochenta años llegaba por tren al apeadero del parque de Canalejas Niceto Alcalá-Zamora que había sido elegido presidente de la República Española un mes antes, concretamente el 10 de diciembre de 1931. Fue en noviembre cuando el alcalde de Alicante Lorenzo Carbonell, desplazado a Madrid, lo había invitado, en calidad de presidente del Comité Revolucionario que había asumido interinamente el poder tras la abdicación del rey Alfonso XIII, a visitar la ciudad y disfrutar de sus fiestas de invierno. Aceptó encantado y su viaje fue el primero oficial que como Jefe del nuevo Estado realizó por España.
Con una de sus hijas, el secretario general de Presidencia Rafael Sánchez Mazas y el jefe de su Cuarto Militar general Gonzalo Queipo de Llano, que era su consuegro, se alojó en estancias habilitadas del flamante Palacio Provincial que recibió para su decoración y acondicionamiento una colección de cuadros procedentes en su mayoría del Museo de Arte Moderno de Madrid y mobiliario de lujo procedente de familias acaudaladas de la zona, algunas de cuyas piezas forman parte de los fondos del MUBAG.
Muy denso sería el programa de visitas que le prepararon a don Niceto y que vamos a intentar resumir al máximo por su extensión. En coche de caballos descubierto marchó por la Explanada, Rambla, Alfonso el Sabio y plaza de la Independencia, donde se soltaron cinco mil palomas, hasta la Diputación Provincial que presidía Franklin Albricias, un pedagogo pastor evangelista. Realizada allí la recepción oficial y una rueda de prensa, pasó luego revista desde el balcón principal a una compañía del Ejército.
Visitó luego la exposición de arte ubicada en el Ateneo, con obras de primeras figuras como Pinazo, Vázquez Díaz, Benlliure y Capuz, asistió a un vino de honor a.bordo del destructor 'Alcalá Galiano', comió con los alcaldes de la comarca en el Ayuntamiento, presenció después en la Rambla un desfile folflórico provincial y cenó en el Salón Imperio del Casino.
El momento tenso se dio cuando un grupo de madres católicas le entregó un escrito quejándose del asalto y quema de establecimientos de la Iglesia sucedido el 11 de mayo de 1931, pidiendo la apertura de los colegios de órdenes religiosas cerrados tras los destrozos así como del asilo Nuestra Señora del Remedio y también que se permitiera el regreso de frailes y monjas a sus conventos clausurados.
El sábado 16 de enero, camino de Elda, se detuvo Alcalá Zamora en Monforte del Cid y ya en la ciudad zapatera colocó la primera piedra del monumento a Emilio Castelar, hubo recepción municipal, vino de honor en el Casino y un regalo de varios pares de zapatos de señora para su esposa e hijas a la vez que se le suplicaba su mediación para subsanar las trabas aduaneras que impedían exportar el calzado eldense.
De regreso a la capital se le sugirió, fuera de programa, acercarse a Elche para presenciar la puesta de sol desde los palmerales. Al no ser comunicada la noticia, se encontraron con el Ayuntamiento cerrado, marchando al Huerto del Cura donde saludaron a su propietario Juan Orts.
Ya en Alicante, de nuevo presenció un desfile, en esta ocasión de festejos provinciales donde no faltaron los Moros y Cristianos de Alcoy y una joven ataviada de Dama de Elche. Tras una cena privada, larguísima gala en el Teatro Principal compuesta de dos conciertos de orquesta de cámara y banda, otras tantas danzas, una obra de los Quintero, discurso alicantinista de Carlos Arniches y un sainete de Serrano Anguita. En total cuatro horas de espectáculo a 100 pesetas palco y 3 pesetas entrada general.
El domingo escuhó misa en la iglesia de San Francisco, junto a la Montañeta, e inauguró oficialmente el palacio de la Diputación y el Museo Provincial ubicado en sus bajos, con secciones de Arqueología y Bellas Artes. Lo acompañaba el arquitecto Juan Vidal Ramos, autor del proyecto.
Por la tarde, aunque era enero, hubo corrida de toros con cartel de lujo y allí acaeció la más divertida anécdota de la visita pues Alcalá Zamora lanzó desde el palco una pitillera de oro al sobresaliente Andrés Coloma 'Clásico' que impactó en la cabeza de un espectador que tuvo la suerte de recibir 250 pesetas, un dineral para la época, en señal de desagravio por la pequeña herida causada.
A las nueve de la noche, exhausto pero satisfecho por el recibimiento, marcharía el presidente de la República en el tren correo con destino a la capital de España