JUAN VILAPLANA SOUSA

ADMINISTRADOR DEL MARQUES DE DOS AGUAS EN ONIL
NACIO EN 1850 EN ONIL.
DESDE 1887 HASTA 1909 FUE ALCALDE Y CONCEJAL EN VARIAS LEGISLATURAS.
1908 DEJA EL CARGO DE ADMINISTRADOR DEL MARQUES.

jueves, 30 de diciembre de 2010

El colera de peste 1854 y 1855

Pila dels frares estaba situado frente al convento por eso de dicho nombre como se le conocia.


El cólera de peste del año 1854 y 1855 que padeció España, Onil fue victima de este hecho, viendo como sus vecinos sufrían la enfermedad. En el verano de 1855 fue cuando el pueblo tuvo su amplitud en la peste horas muy duras para los médicos y cirujanos de la villa así como para el ayuntamiento para paliar aquella peste.
Los médicos eran D. Pedro Sanchiz titular de la Villa.
D. Andrés Amat.
Como cirujanos que prestaron su ayuda. D. Joaquín Sempere.
D. Tomas Escolano
Los cuales se ofrecieron desinteresadamente al Ayuntamiento para prestar toda la ayuda posible sin distinción de clases ya fuera de noche o de día.
Personas pudientes reunieron en donativos tres mil reales que fueron puestas en deposito a cargo D. Matías Rico distribuyéndose lo mejor posible a cada enfermo y cada uno de los enterradores y a los braceros que asistieron voluntariamente a los invalidos. El escribano de la Vila D. José Ramón Cortés se presto a cuantos lo reclamaron en su presencia para autorizar testamentos.

lunes, 6 de diciembre de 2010

El hostal

Foto de la inaguración del hostal.


29 de Abril 1936 se inaugura el nuevo hostal de Onil de la fundación Navarro décadas después daría lugar al Hotel Onix y hoy este edificio esta en ruinas.
La casa hostal D. Vicente Navarro Bellod los bienes que obtenían la intención era que el Ayuntamiento como benefactor repartiera los beneficios entre los pobres y necesitados de la localidad siempre que estos su comportamiento fuera correcto.
En 1935 hay que destacar que pagaron la reforma de la ampliación de la fachada del cementerio.
La puerta del cementerio de hierro forjado hecha por Simeón Sanchis.
La ermita del campo santo en 1920.
Todo ello gracias a la generosidad Don Vicente Navarro Bellod desde su Fundación Navarro Bellod. Así como la puerta de la ermita de la Virgen de la Salud que fue también pagada por este colivenc que amaba su tierra.